Una de las promesas fundamentales de Dios para sus hijos es la promesa de protección y cuidado. Dios nos asegura que está con nosotros en cada paso del camino y que nunca nos entregarseá.Los hijos deben obedecer a sus padres. Aquí se refiere a padres y madres que enseñan a sus hijos los mandamientos de Dios. Los padres que aman a Dios no hará